viernes, 22 de junio de 2012

EL TEATRO DE RIO+20










Iandê Oca tiene un ojo puesto en Brasil, como no podía ser de otra forma. Es fustrante ver lo que hacen nuestros mandatarios para arreglar el desaguisado que ellos mismos, con ayuda de los bancos y los mercados, provocaron ya hace más de cuatro años, y para muestra el último evento internacional que ha tenido lugar en Río esta semana.
La Conferencia de desarrollo sostenible de Naciones Unidas, conocida como Río 2012 o Río+20 ha ocupado muchas páginas de periódicos y minutos de informativos durante la última semana. Se trata de un encuentro internacional organizado por el Departamento de Economía y Asuntos Sociales de la ONU que concluirá hoy en Río de Janeiro, Brasil, coincidiendo con el 20º aniversario de la Cumbre de la Tierra de Río de Janeiro de 1992.
Más de 80.000 personas se manifestaron ayer en los alrededores de la cumbre, convocados por el Grupo de Articulação da Cúpula dos Povos para protestar por lo que consideran una escenificación hipócrita e inútil de la comunidad internacional con el Medio Ambiente. 
      Los manifestantes criticaron las políticas de los países representados y acusaron a sus gobernantes de promover medidas contaminantes que expolian los recursos naturales de los pueblos, la destrucción de la vida y la defensa de las grandes multinacionales capitalistas. Entre otras cosas, este gesto de protesta trató de llamar la atención sobre el momento que la población mundial está viviendo por culpa de la crisis, donde se están dejando a un lado las políticas medioambientales y de cooperación para seguir favoreciendo la concentración de capital en manos de las grandes fortunas internacionales.

 
    Por su parte, la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, en calidad de presidenta de la Conferencia de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible, defendió el principio de responsabilidades compartidas para un desarrollo sostenible, en relación a las diferencias provocadas por el deterioro medioambiental que pesa sobre el mundo industrializado. Según Rousseff, para afrontar el cambio climática es necesario promover acciones que conjuguen el progreso económico con la protección del medio. "El traslado de las industrias contaminantes del norte hacia el sur del planeta provoca un fuerte pasivo socioambiental a los países en desarrollo", enfatizó ante sus pares y representantes de los 193 países miembros de la organización de las Naciones Unidas (ONU).
    La presidenta de Brasil admitió que la crisis global se está interponiendo en los compromisos que debían adoptar los países ricos con los pobres: " En estos momentos el mundo afronta los efectos más graves de la crisis económico-financiera. Las mayores economías están estancadas o entraron en recesión, lo cual llevó a disponer severos recortes fiscales, que dejan en situación muy frágil a los acuerdos de cooperación internacional", indicó. Aseguró que el costo de la falta de acción será mayor que cualquier acuerdo de cooperación que podamos resolver en esta cumbre.
    Lo cierto es que, una vez más, esta cumbre, cara y mediática, sólo ha servido para redactar un único documento que no prevé sanciones para los contaminadores que no cumplan los objetivos. Una oportunidad perdida para imponer una normativa férrea que obligue a los países a imponer un límite de contaminación en sus fronteras y de exigir responsabilidad social de los países del norte con la población del sur, tan víctima como los europeos de los efectos de esta injusta crisis.

jueves, 14 de junio de 2012

LA EDUCACIÓN EN BRASIL FRENA UNA ECONOMÍA CASI IMPARABLE



Brasil se esfuerza en crecer como potencia económica y son notables algunos de sus logros en los últimos años. Sin embargo, ¿está mejorando la calidad de vida de sus ciudadanos al mismo ritmo que su capacidad productiva? Está claro que ciertos sectores sociales sí, pero hay que recordar que el país está superpoblado y que una gran masa de población aún vive en condiciones de pobreza y estas diferencias sociales se reflejan a la perfección en su sistema educativo.

Las favelas de Morumbi, en São Paulo, plasman las diferencias sociales en Brasil.

La diferencia entre la calidad de la enseñanza en centros privados y públicos es muy grande, tanto en el tipo de estudiantes de cada una, como en los recursos y, por tanto en sus resultados.
Es importante conocer que, la población de entre 0 y 24 años, suponen casi cerca de los 80 millones de personas en el país y que esto dificulta ofrecer una educación básica obligatoria, tal como lo establece la constitución brasileña. En este enlace podréis ver más datos sobre la educación pública y privada en Brasil.
El propio sistema social crea una frontera prácticamente infranqueable entre los estudiantes con o sin recursos. Las escuelas públicas más próximas a las zonas de favelas de las grandes ciudades registran las cifras más altas de abandono escolar y de fracaso, mientras que, en los barrios de más prestigio y más caros, se encuentran escuelas privadas que suelen contar con los mejores resultados.
El por qué es claro. Las escuelas privadas reducen el número de alumnos por aula, les ofrecen recursos y materiales adecuados y cuidan al profesorado, mientras que en las escuelas públicas el Estado masifica las clases, apenas concede financiación para recursos materiales y desprecia la formación continua y la valoración salarial de sus docentes. Esta situación ha llevado a la calle a miles de profesores que defienden una mejora en su situación laboral para que así, pueda también mejorar la formación de la población. 
Los datos reflejan que, a pesar de que la educación básica es obligatoria, la menor parte de los estudiantes de escuelas públicas en Brasil continúan sus estudios hasta finalizar los estudios universitarios. Esto provoca que el país necesite mano de obra cualificada en muchos de los sectores más pujantes, algo inexplicable en un país que persigue situarse en lo más alto en el escenario económico y productivo internacional.
La educación es uno de los factores principales para la movilidad social en Brasil. Existe una calidad de fuerza de trabajo tan baja que en la preparación da una ventaja a la hora de trabajar y progresar.
A pesar de los avances de los últimos años, muchos colegios públicos todavía están en clara desventaja con las viejas instituciones privadas. En este sentido, la extensión de una educación de calidad será un factor clave para que este país pueda cumplir sus objetivos económicos.
Uno de los grandes problemas de Brasil, que es su desigualdad social, seguirá sin resolverse mientras no acaben con los problemas estructurales de su educación.
Iandê Oca tratará de solucionar estos problemas a nivel local ofreciendo a los estudiantes de Bom Jesús una escuela donde tengan lo suficiente como para poder seguir ilusionándose con un futuro mejor e igual para todos. 

viernes, 8 de junio de 2012

LA EDUCACIÓN BRASILEÑA PIDE SOCORRO



Brasil es una potencia económica emergente que, cada vez más, se utiliza como ejemplo de crecimiento y desarrollo. Pero ¿puede una sociedad considerarse desarrollada si no garantiza a su población una educación de calidad?
Los profesores de Brasil llevan protestando desde el 17 de mayo por unas condiciones de trabajo que les permita ayudar a su pueblo a crecer, tanto como lo está haciendo su economía. 
Victor Camoes, profesor brasileño, comparte con nosotros los motivos de las huelgas en la enseñanza brasileña en un artículo muy revelador. 
Iandê Oca apoya todas las reivindicaciones de los profesores en Brasil porque sabemos que la educación es el pilar de una sociedad feliz y solidaria. Esperamos poder contribuir pronto en Bom Jesús dos Pobres a vuestra lucha. 




Vitor Camoes, profesor en Brasil.




LA EDUCACIÓN BRASILEÑA PIDE SOCORRO








  
 "La educación pública brasileñay en algunos casos la privada, se encuentra en una situación grave debido al interés de la clase dominante de que el resto de la sociedad no consiga sus mismos derechos: construir una educación de calidad que dé poder al pueblo. Sin embargo, el profesorado está reaccionando a esta situación, se está movilizando y reivindicando en todo el territorio nacional. 
  Existe la intención deliberada de desarticulación de la educación pública por parte de ciertos sectores privilegiados de la sociedad. Las escuelas públicas se encuentran en una situación precaria, con escasos fondos bibliográficos, tecnologías de la información y de la comunicación casi inexistentes o inservibles.
   A esto hay que sumar los bajísimos salarios de los trabajadores del sector educativo, sobre todo de los profesores, la inexistencia de un plan de carrera profesional o la necesidad de reestructuración  del mismo.

  Son mucho los factores que impiden los avances en la educación brasileña en todas sus esferas (municipal, federal y estatal) y las movilizaciones de los profesores en todo el territorio nacional demuestran su insatisfacción. Reivindican mejoras salariales, reestructuración del plano de carrera y las mejoras en sus condiciones de trabajo.

   Los profesores de las universidades federales, después de un periodo de casi una década sufriendo en silencio, desencadenaron las manifestaciones el pasado 17 de mayo, a la que ya se han sumado 47 instituciones de educación superior. La principal reivindicación es la reestructuración del plano de carrera. El sindicato (ANDES)  defiende que el actual modelo no permite una evolución satisfactoria del profesor a lo largo de su carrera.


"A través de las inversiones en Educación se pueden

resolver la gran mayoría de los problemas sociales como

 la violencia, el desempleo, las drogas, la corrupción, la

 explotación infantil o las diferencias sociales causadas 

por la desigual distribución de la renta."

  Los profesores del estado de Bahía invadieron la asamblea legislativa el pasado 13 de mayo y desde entonces ya cuentan 51 días de huelga. Los profesores, representados por la APLB Sindicato, reivindican afirmando que el gobernador del estado, Jaques Vagner, firmó un acuerdo de aumento salarial para todos los niveles, pero sólo se lo concedió a los profesores que no participaron activamente en las protestas.  
  Los medios de comunicación más conservadores han procurado difundir la idea que los profesores están perjudicando a los estudiantes, en un intento de debilitar el movimiento huelguista. Por el contrario, éste se muestra cada vez más fuerte, resistiendo la presión y recibiendo el apoyo de los estudiantes, que también se muestran insatisfechos con la situación de la educación en su país.

  Al margen de la huelga, los profesores de las redes públicas de enseñanza de algunos municipios brasileños también están demostrado su indignación con la situación en la que se encuentra el sistema público educativo. En la ciudad de Santo Amaro da Purificação, en el interior de Bahía, los docentes comenzaron la huelga después de tres meses sin cobrar su sueldo.

 Los problemas en la educación no atañen solamente a la red pública de enseñanza. Hasta los profesores de las escuelas privadas de Salvador celebraron una reunión el día 25 de mayo, decidiendo hacer una paralización del día 28, día que decidieron continuar con las movilizaciones y extendiendo así la huelga a la enseñanza privada. Los profesores de los colegios privados de Aracaju también se sumaron a la huelga.

   Es del conocimiento de todos que, a través de las inversiones en Educación se pueden resolver la gran mayoría de los problemas sociales como la violencia, el desempleo, las drogas, la corrupción, la explotación infantil o las diferencias sociales causadas por la desigual distribución de la renta. También es sabido que no se invierte en Educación debido a los intereses de muchos sectores en mantener el statu quo.

  Los actuales gobiernos, en todas sus esferas, direcciones sus acciones a satisfacer los intereses de la clase dominante. Esto quiere decir que para que la clase alta mantenga su situación privilegiada es preciso continuar el expolio de los trabajadores, el abandono de la población por parte de las autoridades en lo que respecta a los servicios públicos como educación, sanidad, seguridad o vivienda, en la corrupción, en el analfabetismo y en el desempleo, como instrumentos de mantenimiento del sistema vigente. 


"Ser un maestro y no luchar es una inconsistencia 

pedagógica."

   Es necesario esclarecer e informar sobre estas estrategias que son utilizadas para mantener la situación con el objetivo de que la clase trabajadora se politice más. Es imprescindible que esté unida y que se organice para realizar la tan deseada transformación social. Como dice Kart Marx: “La emancipación de las clases trabajadoras tendrá que ser conquistada por las propias clases trabajadoras”.

    Por fin, como dejó escrito el gran maestro, Paulo Freire, todo profesor tiene que reflejar sus actitudes hacia la sociedad. Tanto dentro del aula, en su práctica docente, como fuera, tiene que dar ejemplo, porque al ser un maestro y no luchar es una inconsistencia pedagógica: "Yo soy un profesor contra  en el orden capitalista vigente que inventó esta aberración: la miseria en la abundancia"